Abstract
El tiempo y la conducta asumida, tempus-actus, generan efectos en las relaciones jurídicas. La supressio y surrectio como figuras o fenómenos jurídicos se estructuran tomando como base en el principio de la buena fe (1) objetiva (confianza: lealtad y honra) y consagran formas de pérdida y adquisición de un derecho por el transcurso del tiempo y la conducta; evita el abuso del poder.