Relación entre inteligencia emocional y bullying: revisión aplicada

Abstract

Emotional intelligence is defined as the ability to accurately perceive, evaluate, and express emotions. Bullying is a social variable that has been explained from Vygotsky's ecological theory and social learning model. The aim of this work is to determine the relationship between emotional intelligence and bullying through the review of previous studies carried out in this field. A systematic search was carried out, according to the the PRISMA guidelines indications (Page et al., 2021), in the Scopus, Ebsco and SpringerLink databases. For the analysis, those studies that met the inclusion and exclusion criteria (n=10) were selected. The results showed that there is a statistically significant correlation between emotional intelligence and bullying. It can be concluded that emotional intelligence is a protective factor for bullying victims, aggressors and the educational community; Prevent suicidal risk and suicidal ideation, contribute to stress management, mitigate violent behavior in aggressors and promote the experimentation of positive emotions in adolescents.

La inteligencia emocional se define como la habilidad para la percepción, evaluación y expresión de emociones de forma precisa. El bullying es una variable social que ha sido explicada desde la teoría ecológica y modelo de aprendizaje social de Vigotsky. El objetivo de este trabajo es determinar la relación entre la inteligencia emocional y el bullying a través la revisión de los estudios previos realizados en este ámbito. Se realizó una búsqueda sistemática, según las indicaciones de las guías PRISMA (Page et al., 2021), en las bases de datos Scopus, Ebsco y SpringerLink. Para el análisis, se seleccionaron aquellos estudios que cumplieron con los criterios de inclusión y exclusión (n=10). Los resultados demostraron que existe una correlación estadísticamente significativa entre inteligencia emocional y bullying. Se puede concluir que la inteligencia emocional es un factor protector para las víctimas de bullying, los agresores y la comunidad educativa; previene el riesgo suicida e ideación suicida, contribuye al manejo frente al estrés, mitiga las conductas violentas en los agresores y promueve la experimentación de emociones positivas en los adolescentes.